Creciendo a través de la oración - Hechos 4:23-31, 12:1-18

Un viaje a través de los Hechos: La iglesia dispersa

Es interesante observar lo que hacen Pedro y Juan inmediatamente después de su liberación. Hacen una cosa muy natural y otra muy sobrenatural. La respuesta natural es buscar la comunión de los amigos. La respuesta sobrenatural fue la oración; no sólo el hecho que oraron, sino cómo oraron y el resultado de esa oración. A medida que avancemos en el devocional de hoy, notarás que hay cinco puntos a cubrir. El primer punto es la respuesta natural de Pedro y Juan a la amenaza del Sanedrín, los cuatro restantes son el examen de la respuesta sobrenatural a la amenaza.

1. El PUEBLO de la Oración

Versículo 23: «Cuando fueron liberados, fueron a sus amigos...»

Esta es una respuesta natural; Pedro y Juan acaban de ser amenazados por el más alto tribunal judío, y por eso encuentran consuelo en sus amigos. Todos necesitamos amigos, todos necesitamos un lugar que se sienta como nuestro hogar, todos necesitamos un grupo al que volvamos después de sentir que la vida nos ha golpeado y podamos encontrar algo de consuelo y curación.
¿Quiénes son estas personas? Esta es la iglesia, estos son los creyentes reunidos. La Iglesia está destinada a ser un lugar de conexión, restauración y sanación; un lugar donde se desarrollan amistades genuinas.

2. La Pasión de la Oración

1. Versículo 24: «Al oírlo, alzaron juntos sus voces a Dios...»

Qué buena manera de responder como creyentes. ¡Orar juntos! Si nos enfrentamos a un obstáculo o a una oposición, que nuestra primera respuesta sea la oración.  La imagen es casi musical; suenan varias notas que, aunque diferentes, armonizan en tono y timbre. Al igual que los instrumentos actúan en un gran concierto bajo la dirección de un maestro director, el Espíritu Santo combina las vidas de los miembros de la Iglesia de Cristo.

3. La alabanza de la oración

La oración no es una lista de compras; un componente clave de la oración es la alabanza a Dios. Sin duda, oraron durante algún tiempo y Lucas da un resumen de su oración apasionada en los versículos 24-30; siete versículos en total. Pero lo interesante de su oración es que cinco de los siete versos son oraciones de alabanza a Dios. La mayor parte de su oración es una oración de alabanza.

NOTA: acaban de ser amenazados por el Sanedrín; se reúnen para orar por audacia en su testimonio, pero pasan la mayor parte de su oración no orando por audacia, sino alabando a Dios por lo que es. ¿Por qué harían eso? Esta es la razón: Los cristianos tímidos tienen un dios pequeño, los cristianos audaces tienen un DIOS GRANDE.

4. La PETICIÓN de la Oración

Después de declarar esas verdades teológicas en alabanza a Dios, hacen una petición a nuestro gran Dios en los dos últimos versículos 29 y 30: «Y ahora, Señor, mira sus amenazas y concede a tus siervos seguir hablando tu palabra con toda valentía, mientras extiendes tu mano para sanar, y se realizan señales y prodigios por el nombre de tu santo siervo Jesús».

La oración va en directa oposición al mandato dado por el Sanedrín. Y es interesante notar las cosas por lo cual NO oraron. NO oraron para que Dios quitara a los líderes malvados de su cargo; NO oraron para que Dios quitara las amenazas contra ellos. Ni siquiera oraron para que Dios los protegiera de la persecución o la muerte. Ahora usted puede orar por todas esas cosas, pero solo estoy notando que eso no es lo que ellos oraron.

5. El PRODUCTO de la Oración

Encontramos el producto, el resultado de su oración en el versículo 31: «Y cuando oraron, el lugar donde estaban reunidos fue sacudido, y todos fueron llenos del Espíritu Santo y continuaron hablando la palabra de Dios con audacia».

Su oración fue respondida. Ellos oraron para que hablaran la palabra de Dios con audacia, y eso es exactamente lo que hicieron.

Ministro: El Preboste Canónigo Sammy Wainaina.